Carta a los Reyes Magos para la Mediación

Sólo es suficiente con echar una mínima ojeada por el panorama legislativo y podemos observar  las incongruencias con la realidad en la que los mediadores se desenvuelven: sin parar de demostrar que “somos y estamos”, que trabajamos y luchamos por cambiar paradigmas, por servir a una sociedad que aporta, exige cambios y, nos reclama.

El mediador está desvalido legalmente y, a pesar de ello, su trabajo, tenacidad, y la pasión por esta profesión van abriendo camino a la vez que exigiendo una normativa que finalmente la ampare en su totalidad.

El Legislativo tiene que dejar de obviar la realidad acuciante del ejercicio de la Mediación, cubriendo los vacíos normativos existentes respecto al desarrollo de la misma.

No merece desconcierto alguno el panorama al que nos enfrentamos ya que los que también somos juristas solemos estar acostumbrados al mismo, pero sí  determinación a la hora de tratar legalmente el ejercicio de esta profesión, y no sólo para situarnos, al menos, al nivel de la Unión Europea, sino también para cumplimentar las necesidades de una sociedad que exige cambios.

Por ejemplo, la formación del mediador necesita un replanteamiento y contemplarla como un Grado de Estudios Superiores en Gestión de Conflictos, pues ello determinará la profesión como tal, y provocará el resto de cambios en nuestro ordenamiento jurídico y en la sociedad en general.

Por otra parte, es cierto que la Mediación está dando pasos de gigante en sus diferentes áreas de conocimiento y de aplicación: intrajudicial, mercantil, empresarial, civil, penal, escolar, etc. De ahí que la profesión exija una regulación adecuada para cada especialidad.

En la misma línea, en la intrajudicial, la derivación a Mediación dentro del esquema procesal civil y penal, debería estar específicamente regulada y, no sólo por protocolos, sino normativamente, en virtud del principio de seguridad jurídica y tutela judicial efectiva, facilitando así el trabajo a operadores jurídicos, como jueces y magistrados, que optan por favorecer el camino a este sistema de gestión de conflictos y les falta el apoyo legal básico para ello.

Tampoco encontramos muchas referencias en las leyes procesales y en las sustantivas[1]. Es más, ni siquiera respuesta cuando existen referencias a la legalidad en general, como ocurre, por ejemplo, cuando señala la Ley 5/12, en su artículo 9, que las consecuencias del incumplimiento del principio de confidencialidad “generará responsabilidad en los términos previstos en el ordenamiento jurídico”. Esa referencia general a la legalidad no se puede concretar más que, con independencia de los códigos deontológicos específicos, en las normas sobre responsabilidad civil, pues en cuanto a la responsabilidad penal se refiere y, como bien es sabido, no se podría hacer una interpretación extensa de los artículos del Código penal que incriminan la deslealtad profesional cuando se refieren a abogados y procuradores, por ser contraria a los principios del Derecho penal, quedando el vacío normativo, de nuevo.

En definitiva, aunque el mediador profesional propiamente dicho parece no existir en nuestra legislación, sí es protagonista de un cambio importante en una sociedad, que se presenta ansiosa por romper paradigmas. Por todo ello, mantengo la esperanza de que  el Legislativo cumpla con su labor y escuche a los mediadores para  dar respuesta a los requerimientos sociales y, cubra esos vacíos normativos.

Por eso: Queridos Reyes Magos para el nuevo año te pido que el Legislativo se dé cuenta y reaccione, que el Ejecutivo se ponga en marcha con determinación y, que el Judicial siga apoyando a la Mediación con entrega y predisposición.

Feliz Navidad

María del Castillo Falcón Caro

 

[1] Vid. Ampl. FALCÓN CARO, María del Castillo, La Escuela Integradora. Para el ejercicio personal y profesional de la Mediación, editorial Athenaica, noviembre 2016, pp. 22 y ss.

2 thoughts on “Carta a los Reyes Magos para la Mediación

  1. Se nota que este articulo lo ha escrito una experta en el tema. Esta abordado desde un punto de vista técnico que , a los juristas, nos puede resultar algo más difícil de entender pero el mensaje principal queda claro y esta expresado desde la experiencia y el conocimiento profundo de la materia que se expone. Ojalá tus deseos se hagan realidad!!!

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